03-11-2024 / 0 Comentarios
El Real
Zaragoza sueña en ascenso directo. Porque quedará mucho, pero el 2 de
noviembre, el conjunto maño se va a la cama como segundo clasificado. Todo ello
tras dos goles de delantero puro que anotó Iván Azón, líder indiscutible
de la zona ofensiva, para lograr el 2-1 definitivo. Cuestión aparte y
perfectamente complementaria es que, en medio de la tragedia de Valencia, este
partido nunca debió disputarse.
En la primera
jugada, La Romareda celebró el primero de la tarde. Seguramente, varios de
los que recogían víveres para Valencia no lo vieron. Y allí, Azón, tras
una buena recuperación del equipo, se plantaba a trompicones ante Mariño. El
delantero, que menuda racha lleva, hizo el 1-0 al minuto de juego.
El arranque de
los blanquillos fue sobresaliente. Ver al Granada pasar del
centro del campo era misión imposible debido a la presión del conjunto
zaragozano. Los de Víctor Fernández eran un auténtico vendaval en
intensidad, en ideas y en juego.
Liso tuvo el
segundo tras una gran jugada colectiva que no culminó en el área; también Azón,
que mantuvo esa línea de pelea hasta el final. En todos los sentidos, los
primeros 20 minutos de juego zaragocistas fueron de nota más
que alta.
Sin embargo,
se produjo un tiempo de somnolencia que – menos mal – no duró mucho. El
conjunto zaragocista parecía dormido, pero el Granada no lo
aprovechó. En ese periodo, Sergio Ruiz falló un pase de la muerte,
que fue la más clara de los visitantes. También la tuvo Tsitaishvili, pero
su disparo también se fue alto.
Mantener la
solvencia atrás permitió a los blanquillos recuperar su centro del campo.
Y, por consiguiente, la producción ofensiva. Francho y Calero, tuvieron las dos
últimas. Aunque, nuevamente, falto decisión.
El Real Zaragoza
se marchó al descanso venciendo justamente a su rival, un Granada totalmente
desactivado. Buen partido del equipo maño, que conseguía ser muy superior a su rival.
De forma muy
inteligente, el Real Zaragoza se dedicó a dejar que el tiempo
pasase. Con la pelota para no sufrir, manejando los tiempos, sabedor de que no
había que dar vida a los granadinos. Para ello, era clave tocar mucho y dejar
que tocasen poco.
Y si a eso se
suma tener un delantero como Iván Azón, que sabe exactamente dónde
colocarse y rematar cualquier esférico, jugada redonda. Quedaba en torno a
media hora cuando Liso recortó en el área, centró, peinó Bazdar y remató
directo al fondo de la red. Todo estaba muy bien encarrilado.
A partir de
ahí, el Real Zaragoza dejó morir el partido ante un Granada que, o
cambia, o verá que su pelea está en evitar el descenso. Los blanquillos sufrían
mucho más ante L´Hospitalet en 45 minutos que frente a los de Fran Escribá en
86.
Hay que decir
86 porque emergió Uzuni para anotar un tanto que, realmente, no serviría para
mucho. Especialmente si, antes del saque de centro, su compañero Jozkiak veía
la tarjeta roja por agresión. Así que el 2-1, al menos, dejaba al conjunto
andaluz en inferioridad numérica.
No sucedió
nada desde entonces más allá de otra expulsión. El Real Zaragoza apostó
por Jair que repelió todos los ataques del Granada como un muro. Balón que
volaba, balón que devolvía el central. Y así, los dos tantos de Azón valían una
noche de ascenso directo.
Venció el Real
Zaragoza ante el Granada en el partido que nunca se debió jugar.
Mientras en Valencia se cuentan los muertos por centenas, La Romareda disputaba
como si nada un partido dramático. A efectos prácticos, el duelo más
intrascendente de los últimos tiempos.
En La Liga de
Tebas, en los gobiernos de cualquier color y condición y, en general, en el
mundo del presente siglo, había hueco para el fútbol. Que a escasos 300
kilómetros la Comunidad Valenciana estuviese buscando cadáveres de padres,
hijos y amigos tenía nula trascendencia. Aquí, pan y circo. No vaya a ser que a
alguien le dé por pensar y se derrumbe el chiringuito de unos y otros.
El próximo encuentro
el Real Zaragoza lo disputará el sábado 9 a las 18:30 h. en el estadio El
Alcoraz frente al Huesca.
Ficha técnica:
Real Zaragoza: Poussin; Luna, Vital, Lluís
López, Calero; Aketxe (Toni Moya, min 71’), Marc Aguado, Francho, Liso (Marí,
min 90’); Azón (Jair, min 90’), Bazdar (Pau Sans, min 83’).
Granada C.F.: Mariño; Ricard (Rubén Sánchez,
min 67’), Miguel Rubio, Ignasi Miquel, Brau; Hongla; Pablo S. (Reinier, min
71’), Sergio Ruiz, Manu Trigueros (Corbeanu, min 81’), Tsitaishvili (Jozwiak,
min 67’); Uzuni.
Goles: 1-0, Iván
Azón (min 1’); 2-0, Iván Azón (min 63’); 2-1, Uzuni (min
86’).
Árbitro: Ais Reig. Amonestó a Ignasi
Miquel (min 14’), Lluís López (min 24’), Vital (min 57’). Expulsó con roja
directa a Jozwiak (min 86’) y a Rubén Sánchez por doble amarilla (min 71’ y min
90’).
Resumen del
encuentro: