05-06-2019 / 0 Comentarios
El Real Zaragoza
cerró el curso en casa con un empate a cero frente al Numancia de Soria. Fue un
choque en el que los blanquillos pusieron argumentos para conseguir la
victoria, sin embargo, un inspirado Juan Carlos bajo palos impidió que la
hinchada del león disfrutase de un triunfo para despedir la campaña en el
coliseo zaragozano.
Comenzó el Real
Zaragoza dominando el cuero ante una presión muy alta del cuadro numantino. Los
visitantes encimaban a los futbolistas aragoneses desde el primer instante,
incluso a Álvaro Ratón, que protagonizó una acción destacada al regatearse con
soltura a un atacante rojillo.
El Numancia se
jugaba mucho en el tapete de La Romareda en términos clasificatorios, una
exigencia que mostraron en algunos tramos frente a un Zaragoza suelto,
liberado, con la importante ambición de brindar tres puntos para decir adiós al
curso en el estadio zaragozano.
Ambos conjuntos
demostraron su predisposición a no cometer errores, por lo que se intuía un
encuentro de trincheras y que podía resolverse por un zarpazo. Linares tentó el
gol con un remate de cabeza picado al corazón del área que no consiguió
conectar con Alberto Soro, que entraba solo al remate. Empezaba a jugar la
escuadra en campo contrario.
Pep Biel lamió el gol
con un cabezazo medido a la escuadra derecha tras un fantástico centro de
Carlos Nieto. Minutos después llegó una nueva oportunidad, otra vez de cabeza,
esta vez de Alberto Soro, cuyo remate casi sorprendió a Juan Carlos. El Real
Zaragoza estaba siendo el claro dominador; por fútbol e intensidad.
Se aproximaba
por primera vez el conjunto numantino en el ecuador de la primera parte con un
disparo a media distancia de Marc Mateu que se marchó alejado de los tres
palos. Fue una circunstancia aislada, ya que el conjunto de Víctor Fernández
buscaba el tanto, en esta ocasión con un balón al espacio a Álvaro Vázquez que,
de primeras, lanzó una vaselina que estuvo a punto de sorprender a Juan Carlos.
El Numancia se salvó
del gol gracias de nuevo a Juan Carlos, que detuvo de forma providencial un
fantástico lanzamiento de falta directa a la escuadra. El balón entraba dentro,
tan solo una intervención de nivel pudo sacarlo de dentro. Fue una primera
parte muy completa del equipo blanquillo; sólido en defensa, sin recibir un
tiro a puerta y con ocasiones para ir por delante en el marcador.
Arrancó la segunda
parte y el gol volvió a escaparse, de nuevo Pep Biel, con otro de sus clásicos
disparos, que obligó de nuevo a Juan Carlos a ser determinante con una estirada
al poste bajo zurdo. De esta ocasión, a la del Numancia, con un testarazo de
los sorianos que tuvo que mandar Chechu Dorado a córner ante el peligro de un
posible rechace visitante.
En la recta final
volvió a agitarse la contienda. Álvaro Vázquez rozó el gol con una internada
por banda que impactó en la madera al ser un disparo muy escorado. A la
siguiente jugada, Guillermo disfrutó de una buena oportunidad con un disparo
picado que sacó sobre la línea de gol Raúl Guti.
Finalizó el partido
con empate, con un Real Zaragoza merecedor de los tres puntos: por ocasiones,
intensidad y predisposición, pero enfrente hubo un equipo, y un cancerbero, que
impidió la victoria blanquilla. La Romareda despidió el curso como local hasta
la temporada próxima.
El Real Zaragoza
despedirá la temporada el domingo 9 a las 20:30 h. en el Heliodoro Rodríguez López
contra el Tenerife.
Ficha técnica:
Real Zaragoza: Ratón, Chechu Dorado, Verdasca, Linares
(Marc Gual, m.56), Álvaro Vázquez, Javi Ros (Íñigo Eguaras, m.64), Guti, Nieto,
Delmás, Pep Biel, Alberto Soro (Jorge Pombo, m.80).
Numancia: Sánchez, Kako, Ganea, David Rodríguez
(Guillermo, m.67), Gutiérrez, Medina, Atienza, Gus Ledes, Mateu (Higinio,
m.80), Villalba, Diamanka.
Árbitro: Iglesias Villanueva, comité gallego.
Amonestó a Marc Mateu, Gutiérrez, Atienza del Numancia. Álvaro Vázquez, Pombo
del Real Zaragoza.
Resumen del encuentro:
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