01-12-2024 / 0 Comentarios
El Real
Zaragoza fue ayer el reflejo de las adversidades climatológicas vividas en
La Romareda. Fue un equipo totalmente nublado, frío, incluso triste por
momentos en un día que no acompañó. Así lo aprovechó el Albacete para
reinar e imponerse en un Municipal que asustaba por fútbol y por esa nube que,
a ratos, impedía hasta ver el partido.
Pero, en
cuanto a juego, los de Víctor no transmiten, no dan síntomas de la alegría
futbolística necesaria para estar en lo más alto. Y eso se volvió a evidenciar.
La racha tampoco acompaña, y los blanquillos acumulan cuatro partidos sin
ganar.
Arrancaba un
partido de ida y vuelta, con juego en zona de peligro y un Real Zaragoza que
comenzó muy mal atrás. Juanma avisó a los seis minutos, pero
fue Higinio el que dejó atemorizada a La Romareda, que se rodeaba de
niebla. Solo de ella, porque no se veía el Miguel Servet ni
los edificios contiguos. Por momentos, ni el partido.
Del delantero,
los dos remates que envió al larguero. Primero, con un centro pasado que remató
completamente solo cuando Poussin decidió solo mirar a los 12
minutos. Y menos de cinco después, en un remate franco, solo, con todo a favor
tras un rebote del meta. Prácticamente fueron las únicas, pero, sin duda,
peligrosas como ellas solas. Los maños, para entonces, ya podían irse perdiendo.
El equipo
de Víctor Fernández protagonizaría algo similar a una reacción, pero
insuficiente. Quizá a causa de ese hombre más en el centro del campo, a donde
también acudía Aketxe, que servía habitualmente a Luna para que cabalgase
por banda. Así, los blanquillos daban cierta sensación de peligro.
La tuvo
Bazdar, que pondría la cruz más adelante. Se fiaba todo a la calidad arriba,
sabiendo que, de ganar, sería por un detalle de calidad. Y el Real
Zaragoza la tuvo en las botas de Aketxe, que lanzó un zapatazo para
que Lizoain parase como pocas veces para un portero. Pero, incluso, logrando
blocar la pelota antes de que Azón empujase a puerta vacía.
Fue a partir
de esos 25 minutos cuando se vio un cambio a mejor. O, mejor
dicho, el momento en que los blanquillos sí que jugaron un poco. Quizá,
también, era una sensación que llegaba por consuelo. Así, se comenzaba a
carburar, a acercarse a la meta de Lizoain con peligro y jugando la pelota.
Quedaría por
contar, tristemente, la lesión de Bazdar. El bosnio se tiró al suelo, con
evidentes problemas musculares a los 41 minutos. Y no sucedió más. El frío y la
niebla que, a todos los niveles, protagonizaría el partido.
Ese descanso
que debía servir para consolidar y ganar, fue un desastre. Un duelo sin ideas,
donde las amenazas de los de Víctor Fernández fueron extrañas, a chispas. El
peligro fue prácticamente inexistente y La Romareda vivió una tarde para
olvidar.
Amenazó el
Albacete mediante Quiles, que envió al larguero por tercera vez para el
Albacete. Y los manchegos, después, aprovecharían la suya. El propio atacante
recibió un manotazo de Tasende dentro del área y envió la pena máxima al fondo
de la red en el minuto 75 para un 0-1 que sería
definitivo.
A partir de
ahí, la niebla fue, de forma definitiva, el hilo conductor. Niebla en el juego
del Real Zaragoza, niebla en una Romareda que no podía siquiera ver el
partido, niebla en el ataque, niebla en la defensa. Y frío, mucho frío.
Los disparos
de Aketxe, de Adu Ares y de todos los atacantes salían sin confianza, como
sabiendo que aquel balón no terminaría en el fondo de la red. Se consumieron
los minutos, las ganas, la ilusión. La felicidad también se la llevó la nube.
Y el Real
Zaragoza no dio para más. Se quedó tan nublado como Las Romareda, tan
frío como todos los que acudieron al duelo bajo la nube. Tan triste como el
sentimiento de la derrota una vez más.
El próximo
encuentro los blanquillos lo disputarán el martes 3 a las 21:00 h. en su
estadio de La Romareda contra el Granada; partico correspondiente a la segunda
ronda de Copa del Rey.
Ficha técnica:
Real Zaragoza: Poussin; Luna, Lluís López,
Vital, Tasende; Toni Moya, Keidi Bare (Marí, min 81'); Aketxe, Francho (Adu
Ares, min 65’), Bazdar (Liso, min 41’); Iván Azón.
Albacete: Lizoain; Javi Rueda, Lalo, Jon García,
Juan María; A. Medina (Rai, min 88’), Riki, Pacheco (Lazo, min 77’); Quiles
(Álvaro, min 89’), Higinio (Morcillo, min 58’), Juanma (Javi Villar, min 77’).
Goles: 0-1, Alberto
Quiles de penalti (min 75’).
Árbitro: Guzmán Mansilla. Amonestó a Javi
Rueda (min 46’), Lluís López (min 54’), Tasende (min 72’) y Luna (min 89’)
Resumen del
encuentro: